Las pipetas son una herramienta muy útil para el laboratorio, pero deben usarse con cuidado para garantizar una medición precisa. Aunque existen diferentes tipos y tamaños de pipetas, las más comunes son las de 5, 10 y 25 mL. Las de 5 mL se utilizan generalmente para extraer muestras pequeñas, mientras que las de 10 y 25 mL se utilizan para extraer muestras más grandes. Sin embargo, las de 25 mL son más difíciles de usar y requieren más habilidad.

Las pipetas son una de las piezas de equipamiento más básicas y esenciales de cualquier laboratorio. Se utilizan para medir y transferir pequeñas cantidades de líquidos, y vienen en una variedad de formas y tamaños para adaptarse a diferentes necesidades.
En Kalstein ofrecemos una amplia gama de pipetas, y nuestro equipo de expertos está siempre a su disposición para ayudarle a elegir la pipeta adecuada para sus necesidades.

Cualidades de las Pipetas

Las pipetas son de vidrio o plástico y tienen un cuerpo largo y delgado con una bombilla en un extremo. La ampolla se utiliza para extraer el líquido, y el líquido se dispensa apretando la ampolla y liberando el líquido a través de la pequeña abertura en la punta de la pipeta.

Se clasifican según su precisión y precisión, siendo las de clase A las más precisas y precisas. Las pipetas de las clases B y C son menos precisas y precisas, pero siguen siendo adecuadas para muchas aplicaciones de laboratorio.

Son una herramienta esencial en cualquier laboratorio y se utilizan en una amplia gama de aplicaciones, como la medición de pequeñas cantidades de reactivos, la transferencia de pequeños volúmenes de líquidos y la dispensación de líquidos en tubos de ensayo u otros recipientes.

La mayoría de las pipetas se usan con una mano, aunque también existen pipetas especiales para usar con las dos manos. Estas pipetas se llaman «pipetas volumétricas» y se usan en el laboratorio para medir cantidades precisas de líquido.

Modo de Empleo

Para usar una pipeta, es necesario tener cuidado de no tocar la punta con ninguna parte del cuerpo. Si se toca la punta, es necesario limpiarla con alcohol antes de usarla. También es importante asegurarse de que la punta de la pipeta esté bien insertada en el recipiente que contiene el líquido que se va a medir. Si la punta no está completamente sumergida, la medición puede no ser precisa.

Para extraer una muestra de líquido de un recipiente, se debe colocar en el recipiente y luego aspirar el líquido con la boca. Esto se hace insertando la punta de la pipeta en el líquido y luego succionando el aire. El líquido subirá en función de la cantidad de aire que se haya aspirado.

Una vez que se haya colocado en el recipiente con el líquido, se debe expulsar el aire para permitir que el líquido fluya hacia el recipiente. Para hacer esto, se debe mantener en un ángulo vertical y luego presionar suavemente la boquilla contra el borde del recipiente.

Una vez que se haya presionado la boquilla, se debe seguir presionando para que el líquido fluya hacia el fondo del recipiente. Si se va a medir una cantidad precisa de líquido, es necesario asegurarse de que esté completamente llena, la cual se debe mirar hacia abajo a través de la boquilla de la pipeta para verificar que el líquido llegue hasta el fondo de la boquilla.

Una vez que se haya extraído el líquido, se debe limpiar la punta de la pipeta con alcohol y luego guardarla en un lugar limpio y seco.

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